Estrategias de storytelling en campañas electorales

Estrategias de storytelling en campañas electorales

En una campaña electoral, las propuestas, los planes de gobierno y las estadísticas son fundamentales. Sin embargo, lo que realmente conecta con el electorado no siempre son los datos, sino las emociones. En este contexto, las estrategias de storytelling —o arte de contar historias— se han convertido en una herramienta esencial para los candidatos que buscan no solo informar, sino inspirar, movilizar y construir una identidad política sólida y memorable.

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¿Qué es el storytelling político?

El storytelling en política es el uso estratégico de relatos para transmitir ideas, valores y emociones, con el fin de construir una narrativa coherente que conecte con los votantes. No se trata de inventar historias, sino de darles forma, estructura y propósito a los mensajes que el candidato quiere comunicar.

Las campañas ya no giran solo en torno a “lo que se dice”, sino en “cómo se cuenta”. El candidato deja de ser solo una figura técnica o institucional para convertirse en un personaje con historia, propósito y emociones que lo humanizan ante el electorado.

¿Por qué funciona?

Las historias tienen la capacidad de:

  • Generar empatía: Las personas se sienten reflejadas en experiencias reales o simbólicas.

  • Ser memorables: Un mensaje contado como historia es más fácil de recordar que una lista de datos.

  • Conectar emocionalmente: Una narrativa bien construida puede despertar esperanza, pertenencia, indignación o inspiración.

  • Dar coherencia a la campaña: Un relato claro evita contradicciones y refuerza la identidad del candidato.

Elementos clave del storytelling en una campaña

1. El protagonista
El protagonista es el candidato, pero no en abstracto. Se trata de construirlo como una persona con pasado, presente y una visión de futuro. Su historia debe ser auténtica y alinearse con los valores que promueve.

2. El conflicto
Toda buena historia necesita un desafío. El conflicto en política puede ser una injusticia social, un modelo de gobierno que se busca superar o una situación de crisis. El relato político debe señalar claramente lo que se quiere cambiar y por qué.

3. El propósito o misión
Este es el “para qué” del candidato. ¿Por qué quiere llegar al poder? ¿Cuál es su compromiso con la ciudadanía? El relato debe dar respuesta emocional y racional a esa pregunta.

4. Los aliados y antagonistas
Así como hay un “nosotros”, también suele haber un “ellos”. El storytelling político crea marcos de sentido donde se define quién está con el cambio y quién lo obstaculiza. Esta narrativa debe manejarse con cuidado para no caer en la polarización destructiva.

5. El desenlace deseado
El relato debe proyectar una visión de futuro clara. No se trata solo de criticar, sino de mostrar cómo será el país o la comunidad si el candidato gana. Esta visión debe inspirar y dar esperanza.

Ejemplos de estrategias de storytelling político

  • Narrativa del “autohecho”: El candidato que supera obstáculos personales (pobreza, discriminación, injusticia) y representa al ciudadano común.

  • El héroe colectivo: Una historia centrada no solo en el candidato, sino en la comunidad que impulsa el cambio. El político se presenta como facilitador, no como salvador.

  • La renovación frente al sistema: Relatos que contraponen la figura del candidato nuevo y transparente frente a una clase política tradicional y desgastada.

  • El protector de lo logrado: Ideal en campañas de reelección, donde el relato se centra en defender avances alcanzados frente a un futuro incierto.

Buenas prácticas en el uso del storytelling

  • Ser auténtico: El público detecta fácilmente lo forzado. La historia debe reflejar la realidad del candidato y sus principios.

  • Usar testimonios reales: Incluir historias de ciudadanos refuerza la credibilidad del relato político.

  • Adaptar el mensaje al canal: Una historia puede contarse en un mitin, un video, un tuit o una entrevista. Cada formato exige una estructura y un tono distinto.

  • Evitar el exceso de dramatismo: La emoción es importante, pero el equilibrio es esencial. La historia no debe parecer una novela.

En definitiva,

En un escenario donde los votantes están saturados de mensajes y propuestas, el storytelling permite diferenciarse y crear vínculos emocionales reales con el electorado. No se trata de “contar cuentos”, sino de articular una narrativa honesta, coherente y movilizadora.

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